Mucho se ha escrito sobre el proceso de aceptación de un hijo/a con discapacidad. De los sentimientos de desesperanza, desolación, desencanto, culpa, rabia y tristeza que, casi inevitablemente, se produce en los padres al enfrentarse a diagnósticos tales como: Parálisis Cerebral Infantil, Discapacidad Intelectual, Autismo, Síndrome de Down y otros.
Suele aconsejarse a los padres y madres que atraviesan estas situaciones tener "conformidad", "resignación", "asumir el sacrificio". En fin, con estas frases se les insinúa que no hay alternativas felices, que están condenados a la tristeza irremediable de por vida. Sin embargo, lo que ni siquiera imaginan esos padres y madres es que cuando aprenden a reírse de sí mismos, cuando resurge la risa en la familia, cuando los quehaceres se pueden realizar con alegría, se encuentran formas inauditas de resolver las difíciles situaciones diarias que se presentarán en sus vidas y la de sus hijos.
En nuestro trabajo con padres y madres de niños/as especiales hemos podido constatar como la alegría, la risa, el sentido del humor de los padres y de la familia en general, son elementos que indican que se ha realizado la aceptación del hecho, y más aún, de que se ha realizado la reconciliación con la vida misma, de que se han encontrado los mecanismos personales para asumir el reto y hacer más felices la vida de los niños.
En la película "La Vida es Bella" sobre el holocausto de los judíos, hay una escena memorable donde el padre, camino a ser fusilado, desfila con gracia y complicidad frente a su hijo, haciéndole creer que todo es un juego. Indiscutiblemente que hay una gran enseñanza en esa manera de enfrentar las situaciones difíciles.
La realidad es que los padres y las madres pierden la alegría por un tiempo, y a veces, por demasiado tiempo, sin hacer conciencia de que su hijo/a dependerá emocionalmente del estado de ánimo y del temple afectivo de los que le rodean y le cuidan diariamente.
Es por eso que la meta en la crianza de un niño/a con discapacidad, es la risa. No la sonrisa de la decepción o el desencanto, no la risa por despecho. Me refiero a la risa que produce la aceptación plena de una situación que no se puede cambiar, pero a la que le hemos encontrado sentido, la que sentimos que de alguna forma ha enriquecido nuestras vidas. La risa que se produce cuando podemos apreciar y disfrutar los mínimos progresos del niño/a, porque sabemos le ha costado un gran esfuerzo. Disfrutemos la risa que nos contagian los propios niños/as ajenos a las dificultades con la que han nacido.
(Maritza López, autora de este artículo, es Médico Psiquiatra Infanto-Juvenil y madre de un joven con Autismo y Discapacidad Intelectual).
Hola Carmen: yo me preguntaba cuando leía el texto, en el primer párrafo los sentimientos comunes: desesperanza, desolación, desencanto, culpa, rabia y tristeza, ¿de dónde vienen estos sentimientos? según el diccionario, los 3 primeros sentimientos vienen de la pérdida de la ilusión, de la admiración por una persona o cosa y los otros 3 provienen de cuando algo no sale según lo planeado. Pienso, entonces, que los sentimientos negativos tienen su origen en que los padres tenían planeado cómo iban a salir las cosas con su hijo y cuando las cosas cambian sufren crisis y acaban por resignarse. Tal vez muchos padres planeen demasiadas cosas sobre sus hijos incluso antes de tenerlos y ahí tenga la raíz todos los problemas que surgen cuando esos planes se vienen abajo.
ResponderEliminarY sobre el 5º párrafo, donde menciona la dependencia emocional del niño de los padres, quería decir que no sólo el propio hijo, sino los hermanos, que también aceptarán a su hermano más rápido, cuanto más rápido lo acepten sus padres.
Un saludo
Hola Carmen:
ResponderEliminarEste texto me ha impresionado, porque un niño con una discapacidad, no deja de ser una persona normal.
En el texto se dice: "a los padres se les aconseja tener conformidad, resignación y asumir el sacrificio." yo pienso que las personas que dicen eso, es por que no tienen sentimientos, hacia estas personas, y que piensan, cuanto más lejos mejor.
Estoy de acuerdo con el autor en que la meta de un niño con discapacidad es la risa, también pienso que es la felicidad porque no lo puedes evitar y aunque sea diferente nos debemos sentir felices, ya que estas personas pueden llegar a ser grandes personas, me acuerdo de una persona que tiene síndrome de down y que ha sido el único europeo en llegar a la universidad y sacarse una carrera habrá gente que diga que eso es imposible, pero aunque no nos lo creamos esas personas son iguales que nosotros.
En conclusión, pienso que todos somos iguales, ya tengamos discapacidades físicas o psíquicas, porque como dice el mensaje de la película "La bella y la bestia" la belleza está en el interior.
Hasta Pronto
Sergio Barajas Cruz 4º ESO B
Hola, José:
ResponderEliminarSi analizamos los sentimientos, vemos que cada uno tiene su contrario: ilusión-desilusión, esperanza-desesperanza, encanto (o admiración)-desencanto, alegría-tristeza, etc.
Además, si te fijas, muchos de ellos son sinónimos de un mismo estado. Así, podemos decir: "Me han ofrecido una oferta de trabajo y me siento muy ilusionado, muy esperanzado, muy contento…", o lo contrario, si algo no nos ha ido bien: "Me siento algo desilusionado, triste, desesperanzado, etc.".
Atendiendo a lo que comentas sobre el texto, es lógico que las parejas que conocen que van a ser padres estén, desde ese momento, ilusionados, contentos, y que tengan esperanzas en que ese hijo será un niño feliz, sano, y con todas las capacidades para llegar a ser lo que él quiera.
Igualmente es lógico que si el niño nace con alguna discapacidad, los padres sufran un duro golpe a sus ilusiones, y necesiten un período de aceptación del hecho, y también ayuda para saber cómo manejarse frente a esa situación inesperada y, al principio, dolorosa y desalentadora.
Por esto, lo que nos cuenta esta madre, Maritza, es una lección de amor y de valor.
Tienes mucha razón cuando dices que en la medida en que los padres, los hermanos y el resto de la familia acepten a ese niño con su particularidad, ese niño será feliz y aportará felicidad a los suyos. Y, como ya se sabe, allá donde hay felicidad, suena a menudo la música de la alegría, que no es otra que la risa…
Muy buen comentario, José. Cada vez vas profundizando más en la esencia de los textos, y planteas cuestiones muy interesantes. Piensa que cuanto más escribas y redactes, más capacidad de expresión irás adquiriendo.
También te felicito por tu gran mejora en la ortografía. Como ves, hay esfuerzos que no son en balde.
Un saludo.
Hola, Sergio:
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con tu mensaje de fondo, aunque yo creo que está mejor expresado si dices que todas las personas tenemos el mismo derecho a la vida y a la felicidad, y que podemos aportar muchas cosas a los demás y a la sociedad desde nuestra diferencia.
Porque lo cierto es que ninguna persona es igual, sino que todos somos únicos, diferentes.
En cuanto a los que aconsejan a los padres que tienen hijos con alguna discapacidad “tener conformidad, resignación y asumir el sacrificio”, no hay que pensar que lo hacen por falta de sentimientos; más bien puede ser la ignorancia, o el temor, lo que les hace decir esto.
Es verdad que en las personas hay una belleza interior, de igual forma que hay una belleza exterior. Y lo ideal sería que ambas fueran juntas; pero cuando no es así, la realmente importante es la interior, que nunca se marchita y aporta más felicidad y bondad al mundo que la belleza exterior, cuando está exenta de valores éticos.
PARTE ORTOGRÁFICA:
-es por que no tienen sentimientos (…es porque no tienen sentimientos).
Sergio, has de repasar las normas sobre el correcto uso de las comas.
Una última cosa: es innecesario que al final del comentario vuelvas a poner tu nombre, apellidos y curso, puesto que ya lo pones en su sitio adecuado: URL/NOMBRE, y por tanto ya sale.
Bueno, espero que muy pronto irás mejorando los aspectos ortográficos que te he señalado, y profundizando en tus opiniones. Sobre todo, huye de los tópicos. Busca dentro de ti tus propias palabras, que siempre han de ser sinceras, concuerden o no con lo que dice el texto u opinan otros.
Un saludo.
Hola, Carmen:
ResponderEliminarEste texto tiene mucha razón, ya que, es muy duro ver como niños que están en la mejor etapa de su vida dependen de alguien para hacer cualquier cosa, y no solo eso sino que además siempre tienen motivos para estar felices y animar a los demás para entender que su enfermedad no es ningún problema para llevar una vida “normal” y feliz. Estos chicos son un ejemplo de superación porque con mucho menos que cualquier persona normal son muchísimo más felices, ya que cualquier persona en nuestro lugar estaría todo el día maldiciendo el momento en que nació, mientras que ellos siempre tienen una sonrisa para todo, ya que, solamente dan importancia a las cosas que de verdad la tienen.
A sus madres yo les diría que no es ningún sacrificio, no sé cómo reaccionaría yo ante una situación así pero lo que sí tengo claro es que esas personas no tienen culpa de nada lo único que quieren es tener una vida normal sin tener que depender de nadie.
También hay que intentar integrarles en la sociedad como por ejemplo dándoles trabajo debido a que algunos, aunque quieran trabajar, la sociedad no les da trabajo y la verdad es que posiblemente no la hagan igual que alguien normal pero seguro que ponen más ganas que alguien que lo tiene todo.
Un saludo
Hola, Carmen.
ResponderEliminarImaginarse en una situación como esta es difícil, porque debe de ser mucho más duro de lo que parece.
Admiro a todos aquellos que son capaces de, como se menciona en el texto, sacar una sonrisa y afrontar lo que les ha tocado. Pienso que es una oportunidad que la vida les ofrece para superarse, para ganar coraje, para valorar mucho más las cosas, etc., porque es verdad que hasta que no nos vemos metidos en asuntos como estos, no lo hacemos.
Estoy totalmente de acuerdo con la idea de que el estado de ánimo de los niñ@s dependerá de manera directa con el que haya en su entorno (familia, amigos, colegio, etc.) y por eso es aún más importante que todos aquellos que lo forman lo acepten y se lo tomen de manera optimista.
Como queda demostrado la risa es su única "medicina" y meta, ya que es lo que les ayudará a ser más felices.
Cada vez que escucho o leo algún tema similar, me doy cuenta de la suerte que muchos tenemos y siento rabia al mismo tiempo porque no aprovechamos la mayoría de las veces todo de lo que disponemos.
Si me permitís daros un consejo: aprendamos de ellos.
Hola, Laura:
ResponderEliminarDarse cuenta de lo afortunados que somos es importante, porque nos ayuda a ser más altruistas, ¿no crees?
Pero, además de ser conscientes de nuestra suerte, deberíamos hacer algo más concreto, como, por ejemplo, ayudar a mejorar las cosas de nuestro alrededor, o desarrollar nuestras potencialidades al máximo.
Ya conoces la frase, “al que más se le da, más se le pide”.
Piensa en aquellos aspectos que puedas mejorar, empezando por ti y continuando con los que te rodean. Estoy segura de que te sentirás mejor y te liberarás de ese malestar que te causa el sentir que no aprovechas todo aquello de lo que dispones.
Te expresas muy bien, Laura, y vas mejorando la ortografía, pero hay que seguir adelante. Por esto, te señalaré algunos errores, la mayoría por ausencia de una coma.
-…una situación como esta… (…una situación como ésta…).
- …de los niñ@s (Sé que últimamente es usual utilizar este signo, incluso en artículos periodísticos, pero gramaticalmente no es correcto. Mi consejo es que en los escritos de carácter académico, no lo uses).
-Como queda demostrado la risa… (Como queda demostrado, la risa…).
-…con el que haya en su entorno (familia, amigos, colegio, etc.) y por eso… (… con el que haya en su entorno (familia, amigos, colegio, etc.), y por eso…).
-…y siento rabia al mismo tiempo porque… (… y siento rabia al mismo tiempo, porque…).
Hasta pronto.
Hola, Carlos:
ResponderEliminarBuena observación cuando dices: “solamente dan importancia a las cosas que de verdad la tienen”: es una lección que la mayoría deberíamos aprender y tener presente en nuestra vida.
Estoy de acuerdo cuando dices que es difícil saber cómo reaccionaríamos en una situación así; sólo se sabe lo que se vive.
Y ojalá existiese trabajo para todos, incluidas estas personas especiales, pero, como sabes, el trabajo es un bien que escasea en estos momentos que vivimos. Tal vez, en estas circunstancias, todos aprendamos el valor del trabajo como medio para desarrollarnos, y no como un simple medio de ganar dinero.
Debes mejorar la parte ortográfica. Utilizas frases demasiado largas sin casi usar comas, y pones algunas donde no corresponde. En general, ésta es la parte que más debes reforzar; así que estúdiala en algún manual de gramática que tengas, o búscalo en internet, que los hay.
Te entregaré una pequeña tarea.
Hasta pronto.
Hola Carmen:
ResponderEliminarEn primer lugar me gustaría resaltar el primer párrafo, que trata sobre la conformidad que deben tener los padres ante un caso similar, esas palabras llegan muy profundo porque visto desde fuera o en cualquier caso que no sea cercano, es fácil dar consejos, consolar, pero no es menos cierto que debe de ser tremendo sufrirlo uno mismo.
Estas palabras del texto: Suele aconsejarse a los padres y madres que atraviesan estas situaciones tener "conformidad", "resignación", "asumir el sacrificio” a mi punto de vista no ayudan como bien dice la autora ya que en ningún caso debe haber resignación ya que lo mas bonito es tener un hijo y que este cerca de ti y mucho menos será un sacrificio cuidarle.
El punto que trata el autor sobre el estado de ánimo de la familia al recibir a un hijo así, a mi parecer es total mente correcto ya que el estado emocional de las personas se trasmite, es decir, que para un niño de estas características el estado emocional de sus padres, de la gente que lo quiere, le hará sentirse mucho mejor y mas feliz y al mismo tiempo corresponderá recíprocamente a sus padres ya que ellos verán como su hijo esta bien.
Como conclusión y opinión personal quería decir que cualquier persona con alguna discapacidad es igual que otra que no la tenga, sobre todo no hay que hacerles diferentes, aunque necesiten más cuidados, y para concluir para ser feliz hay que hacer reír.
Un saludo
Hola Carmen:
ResponderEliminarYo pienso que los padres tienen que querer a sus hijos desde el momento que nacen, no como dice el texto, cuando empiezan a reírse de sí mísmos.
Yo le encuentro otro significado a la meta, que cunado no la alcanzamos también nos reímos por la satisfacción que nos produce haberlo conseguido.
Un saludo Carmen.
Hola, Jesús:
ResponderEliminarTengo la impresión que has leido el texto a toda prisa, y no lo has comprendido nada bien.
Haremos una cosa: vuelves a leerlo con atención, y después lo comentas de nuevo; pero hazlo de una forma clara, que se entienda. Te lo digo porque si lees tu propio comentario, te darás cuenta de que cometes una gran contradicción en lo que expresas.
Inténtalo de nuevo, ¿vale?, que aquí estamos todos para aprender.
Un saludo.
Hola, Raquel:
ResponderEliminarYa veo que estás totalmente de acuerdo con el texto. En este sentido, quizás podrías haber profundizado en algún aspecto en concreto. Pero estoy segura que la próxima vez lo harás mejor.
Lo que me ha gustado es como has estructurado tu comentario, punto por punto, y señalando claramente a que parte del texto te estabas refiriendo. Esto está muy bien.
A nivel de redacción, tienes potencial para mejorar muchísimo, pues se ve que sabes exponer tus ideas de forma clara, aunque necesitas practicar más. Creo que puedes llegar a escribir muy bien, si te lo propones.
Tu nivel ortográfico tampoco es nada malo, pero aún debes mejorarlo: no cometes faltas graves, pero fallas un poco en las comas.
Para que progreses, mañana te entregaré una tarea muy sencilla de hacer, pero que requiere que prestes mucha atención y aprendas de las conclusiones que saques, ¿te parece?
Un saludo, y espero que sigas comentando textos, y con mayor atrevimiento, es decir: poniendo más cosas de tu propia cosecha.
¡Hasta pronto, Raquel!
Hola, Carmen:
ResponderEliminarEstas madres no deberían sentirse culpables por haber tenido un hijo con estas enfermedades, sino afrontarlo como un reto personal. Nadie elige su futuro, por eso hay que adaptarse a él. Si que existe una alternativa feliz en estos casos pero es difícil de encontrar y muchos padres lo consiguen a base de esfuerzo. Tiene que ser duro ver como tu hijo crece y los rasgos de estas enfermedades se acentúan, pero no puedes darte por vencido tienes que luchar por sacar tu hijo adelante.
Como dice el texto: `` su hijo/a dependerá emocionalmente del estado de ánimo y del temple afectivo de los que le rodean y le cuidan diariamente ´´, por tanto hay que tratarlos como a chicos normales para que ellos no sientan que por su culpa su madre esta triste.
Hola, Álvaro:
ResponderEliminarTu comentario es muy sensato, aunque podrías haber profundizado más, ya que, en realidad, lo que expresas es tu total acuerdo con lo que dice el texto. Pero está bien resumido y redactado, y esto también lo valoro.
Evidentemente, no siempre es fácil para los padres implicados tener esta actitud positiva, ya que, como bien dice el refrán, “Los toros siempre se ven mejor desde la barrera”. Pero, en fin, hay que intentarlo,y yo creo que el amor ayuda mucho a ello.
PARTE ORTOGRÁFICA:
Tienes bastante buen nivel, pero aún debes mejorarlo más. Te indicaré las faltas, para que, al menos éstas, no vuelvas a cometerlas:
-Si que existe una alternativa feliz en estos casos pero es difícil… (Sí que existe una alternativa feliz en estos casos, pero es difícil…). Además de en la coma que faltaba, fíjate en el “sí”, que se acentúa, al ser un “sí” afirmativo, al contrario del “si” condicional: si mañana lloviera…
- …pero no puedes darte por vencido tienes que luchar por sacar tu hijo adelante. (…pero no puedes darte por vencido; tienes que luchar por sacar tu hijo adelante.).
- `` su hijo/a….. le cuidan diariamente ´´ (“su hijo/a….. le cuidan diariamente”). Este signo está en la tecla del nº 2, y has de apretar, a la vez, la tecla de las mayúsculas.
-…por tanto hay que tratarlos como a chicos normales, para que ellos no sientan que … (…por tanto, hay que tratarlos como a chicos normales, para que ellos no sientan que …).
Bueno, Álvaro, ya ves que es más una cuestión del uso correcto de las comas. Deberías estudiar este aspecto de la gramática, para que vayas progresando, ya que te expresas muy bien, y tus opiniones tienen sustancia. Vale la pena, pues, mejorar la forma…
Un saludo, y buen fin de semana.
¡Hola, Carmen! ¿Qué tal?
ResponderEliminarBueno en primer lugar, decir que yo estoy muy de acuerdo con este texto.
Yo creo que, de primeras, cualquier pareja que esté esperando un niño/a , y de la noche a la mañana les comuniquen que su hijo sufre una discapacidad, entra en un estado de tristeza, reflexión, confusión… pero con ayuda de la familia y amigos, se puede solucionar.
Yo pienso que tener un hijo con discapacidad, no es nada malo, es algo que puede tocar a cualquier persona, y hay que aprender a vivir con ello. Los niños con discapacidad, ayudan a que los padres maduren y sean más fuertes, suelen ser niños bastante agradecidos. Los padres tienen que ir luchando día a día y por eso, acaban teniendo una inmensa paciencia; tienen que tener sobre todo pensamientos positivos, y como bien dice el texto, mostrar siempre una risa.
Por último, decir que a pesar de tener una discapacidad, siguen siendo niños normales, por lo que hay que educarlos como a cualquier otro niño, aunque requieran más atención; los padres no tienen que actuar con él como si le debiesen algo, es decir, como si tuviesen la culpa de su discapacidad, ya que de eso no tiene culpa nadie.
Un saludo.
Hola, Bea:
ResponderEliminarUn comentario muy sensato y lleno de sana sensibilidad.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, así que poco puedo añadir a lo dicho por ti; tal vez, que el entorno de esos padres, y la sociedad en general, debería ayudarles y facilitarles las cosas, si lo necesitan, pues no todos los padres son fuertes.
Incluso, a veces, los propios padres sufren algún déficit, ya sea físico, psicológico, o de cualquier otro tipo (pienso en padres toxicómanos), que les impide afrontar el tema de cómo educar a ese hijo "especial" del modo más positivo.
Lo cierto es que no siempre esos hijos, que ya nacen con cierto hándicap, lo hacen en un entorno familiar lo suficientemente preparado...
Te felicito también por tu buen nivel de escritura, y lo bien que expresas tus ideas.
Un saludo, Bea.
Hola carmen:
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con el texto en el tema de que los padres pierden la sonrisa muchas veces durante demasiado tiempo, creo que los hijos deberíamos ayudarlos a volver a sonreír cuando están tristes y mostrarles lo agradecidos que estamos por verlos alegres.
Sobre los niños especiales, seguro que los primero que sienten sus padres al verlos es tristeza, pero después vienen los buenos momentos, las risas, los abrazos, disfrutan de su hijo aunque sea diferente, porque es su hijo.
Por último quiero decir, que lo que más felicidad da a un padre o madre es ver feliz a su hijo aunque tenga una enfermedad, pero eso le hace más especial.
Adiós Carmen, hasta el próximo comentario.
Un beso
Hola, María:
ResponderEliminarTus opiniones siempre expresan tu sensibilidad, como en esa frase en la que dices que los hijos deberían ayudar a sus padres a volver a sonreír cuando están tristes.
Como ya vas mejorando mucho en tu modo de redactar, y también en tu ortografía, ahora me gustaría que dieras un paso adelante en cómo estructurar u organizar tus comentarios. En las pautas que os entregué, está indicada la manera y el orden de los distintos puntos a seguir. Si tuvieras dudas, me las consultas sin problemas.
En el próximo comentario, quiero que intentes seguir esas indicaciones, punto por punto.
Ese método te ayudará a localizar la idea principal del texto que estés comentando, a señalarla, y a dar tu opinión sobre ella.
Además, de este modo, irás progresando en la comprensión de los textos que tengas que leer y en sacar rápidamente las ideas esenciales, cosa que te facilitará la tarea de estudiar, ya que no puedes aprenderte todo lo que dicen los libros, palabra por palabra; es preciso quedarse con las ideas y conceptos esenciales.
Inténtalo, María, y verás como irás progresando en la medida en que vayas aprendiendo a estudiar, y encuentres tu propio método, que, además, te ahorrará esfuerzos innecesarios y te cundirá mucho más. ¿Lo harás?
Un saludo, y ánimo, que lo estás haciendo muy bien.
Hola carmen:
ResponderEliminarSoy Carlos lópez de la clase de 4º ESO B he visto este tema y me a gustado porque los padres me parecen que son muy valientes para dar todo lo que puedan a sus hijos ,por ejemplo, la felicidad porque estos niños enfermos para mí es lo que quieren lo que quieren es felicidad y que les demos cariño.
Lo que as contado en lo de la película de la vida es bella yo he visto esa pelicula y me gustado porque el padre me para mi es valiente dar la vida por sus hijos cosa que algunos padres no la dan.
Adiós carmen espero que te halla gustado mi comentario y hasta el próximo
Hola Carmen:
ResponderEliminarque ahora que me doy cuenta es que no e puesto mi opinión. Mi opinión es que yo estoy de acuerdo con este texto
Hola, Carlos:
ResponderEliminarQue te hayas decidido a participar está bien y me alegro, ahora falta que te pongas un poco más en serio Carlos.
Te pido por favor que cuando vayas a escribir un comentario te pongas delante la hoja que te di en clase sobre las normas para hacer un buen comentario. Después de leerlas atentamente estoy segura de que el próximo te saldrá mejor.
Ahora te comento algunas faltas de ortografía:
- "a gustado" se escribe ha gustado.
- "as contado" se escribe también con h porque son verbos compuestos con el verbo haber, siempre se escriben con h, entonces sería, has contado.
- "Halla gustado" es del verbo haber, haya gustado.
Hay frases en las que te faltan palabras para que tengan sentido.
Y te faltan comas para que se pueda leer correctamente.
En fin Carlos, tienes mucho que mejorar en la escritura como puedes ver. Espero que pongas interés y aprendas.
Y espero también que pongas más empeño en la comprensión profunda del mensaje del texto.
Hasta pronto.
Hola Carmen.
ResponderEliminarMe ha gustado el texto y creo que se puede comentar mucho sobre él.
Estoy de acuerdo con el primer párrafo, al describir los sentimientos de los padres que se enfrentan a ésta situación. Recibir una noticia así, en una etapa tan bonita de tu vida, debe caer como una jarra de agua fría en la cabeza; todo lo que pensabas, soñabas y esperabas, se vé perdido. Cuésta mucho reaccionar porque hay rabia, disgusto, dudas y sobre todo miedo, no por tener un hijo con problemas, sino por no saber si van a poder ser tan fuertes como deben ser.
Después llegan, como muy bien dice el texto, "las alegrías", porque no hay nada más grande que ver crecer a ese niño, que se supera día a día y le gana el pulso al reto que se le presenta en su vida. Creo que estos padres son felices, porque es muy grande lo que reciben a cambio, que es el amor tan inmenso y sincero de sus hijos.
Por otra parte, cuando el autor dice: "Aconsejan tener resignación, conformidad", nunca, nunca, debemos aceptar esos consejos, porque la lucha y el afán de superación, es lo que hace fuerte a las personas, y en vez de aconsejar de esa manera, que ocupen su tiempo en intentar dar soluciones para que un día desaparezcan todas las barreras, que estas personas tienen que superar cada día, y entre todos intentar crear una sociedad más humana.
¿Qué sabemos nadie que no estemos en esa situación?
Un saludo.
Hola, Carmen:
ResponderEliminarBuen comentario. Quiero destacar tu frase: “¿Qué sabemos nadie que no estemos en esa situación?”. Así es, por esto debemos procurar juzgar y “aconsejar” menos, y comprender y ayudar más con nuestra actitud y disposición.
Cuando la vida nos defrauda, nos brinda una lección… aunque no siempre estamos preparados para aprenderla al momento. Pero, tarde o temprano, ese momento llega. Entonces, si tenemos el valor de mirar la vida cara a cara, crecemos.
Te expresas bien por escrito. Y aún lo harás mucho mejor, si te lo propones. Entre escribir bien y escribir muy bien hay una barrera. ¿La superarás o te conformarás?
Te señalo tres errores:
-Hola Carmen. (Hola, Carmen.)
-vé (ve)
-Cuésta (Cuesta)
El tema de las comas (el más complicado) lo dominas bastante. Mi consejo es que cuando leas algún libro, te fijes en este aspecto del lenguaje, que es tan personal en cada autor. En cualquier caso, dentro de esa flexibilidad, hay un uso correcto e incorrecto de este signo, ya que una coma puede cambiar todo el sentido de una frase.
Bueno, Carmen, espero que sigas aportando tus reflexiones sobre cualquier texto que te interese, pues es bueno expresar las ideas, tratando de ir siempre un poco más lejos.
Un saludo.
Hola Carmen:
ResponderEliminarYo he escogido este tema porque es un tema que me gusta, puesto que tengo un amigo que sufre una de estas discapacidades, es algo que yo lo he vivido en primera persona, por lo que me gustaría hablar de ello.
En mi opinión aceptar una situación como esta no es nada fácil, ya que cuando unos padres se deciden a tener un hijo, a nadie se le pasa por la cabeza que pueda ser él al que le toque sufrir una discapacidad, por eso pienso que este también es un problema, ya que muchas personas creen que todo en su vida tiene que ser perfecto y, una vez que se hayan comprado el chalet, el coche y hayan conseguido un puesto de trabajo inigualable, piden a la naturaleza un hijo, que eso está muy bien, pero también tienen que pensar en que la vida les puede dar un palo, y tienen que saber afrontarlo, cuando antes lo asuman mejor, porque así podrán alcanzar la felicidad.
No estoy de acuerdo con lo que se les aconseja a los padres, "conformidad", "resignación", "asumir el sacrificio", eso no es así en absoluto, puesto que es tu hijo y no tiene porque ser un sacrificio cuidarle, ¿no es cierto que a los hijos se les quiere siempre, aunque tengan alguna discapacidad?, o al menos esa es la educación que a mi me han dado. “Resignación”, ¿por qué?, ¿por qué tu hijo sea diferente?, ¿por qué no pueda hacer cosas “normales”?, pues probablemente esos niños sean muy felices y no haya en ellos tanta maldad ni violencia como la puede haber en un niño “normal” de su edad.
Con respecto al tercer párrafo estoy de acuerdo con todo lo que dice, ya que se respira en la familia un ambiente de felicidad y de alegría, cada palabra o cada paso que vaya dando supone todo un motivo de celebración.
Por ejemplo si un niño “normal” en la clase de E. Física hace veinte abdominales, probablemente ni siquiera se lo contará a sus padres, no estará feliz por haberlo hecho, lo ve de lo más común, o incluso puede que hasta se llegue a enfadar porque otro compañero a hecho más que él.
Sin embargo un niño con una discapacidad hace veinte abdominales y eso es un motivo de alegría para él y para toda su familia, es superarse a sí mismo. Sus padres se sentirán orgullosos y estarán felices todo el día, cosa que los padres del otro niño no, porque ni tan siquiera se habrán enterado.
Por lo tanto uno de los principales motivos de que estos niños sea tan cariñosos y tan agradecidos, es gracias a su familia, que a pesar de ser una situación difícil, se asume la noticia, se trata de sacar la parte positiva de todo ello, entre todos los miembros lo ayudan y de está manera se consigue que la persona con discapacidad pueda ser alguien y de este modo llegar muy alto a lo largo de toda su vida.
Buenas Carmen:
ResponderEliminarPaso a comentarte este tema, que a mi me a tocado vivir de forma mas bien directa, ya que un familiar allegado sufre una pequeña Parálisis Cerebral.
Lo que en primer lugar se aconseja a los padres que les toca sufrir esta difícil circunstancia, es que tengan “conformidad”, “resignación”, y que asuman el sacrificio, es desde mi punto de vista, muy fácil de decir, pero muy difícil de cumplir, porque aunque creo que no deben estar condenados a la tristeza, los primeros que deben aceptar esa situación son ellos, y si los mismos padres no se quitan la venda de los ojos para ver las cosas claras, y nos hacen ver a los demás que sus hijos son normales, y con el paso del tiempo incluso a su hijo le hacen ver que es normal, no sólo se están haciendo daño a ellos mismos, sino lo que es peor, se lo están haciendo a su propio hijo. Pues, debemos de aceptar las cosas según nos vienen, y no por intentar negar una realidad, va a dejar de ser así.
Creo que los padres, pasado el mal momento de la aceptación, viene después el de la integración y del saber llevar las cosas lo mejor posible, y la forma más adecuada también creo que es intentarla vivir lo mas felizmente, porque aunque creamos que no esos niños se dan cuenta de cuando les estamos mintiendo, y si ellos se sienten engañados, no sienten ni cariño ni confianza en sus padres, pero si por el contrario les transmitimos felicidad y los aceptamos realmente como son, esta conformidad nos va a dar a todos paz y tranquilidad, y eso el niño lo va a agradecer a su forma, siendo feliz y al mismo tiempo siendo feliz sus padres.
Hola, Sandra:
ResponderEliminarSe nota que sabes de lo que hablas, y es que cuando algo se vive en primera persona tienes un conocimiento profundo de las cosas. Coincido contigo en que debe de ser difícil enfrentarse a una experiencia tan dolorosa, sobre todo, porque debes superar tu propia frustración y además intentar ayudar a tu hijo a vivir con alegria.
Buen comentario, solo comentarte que "me ha tocado" es con hache, y te faltan algunas comas, pero en general es aceptable.
Hasta pronto.
Hola, Irene:
ResponderEliminarEs cierto, la aceptación no tiene nada qué ver con la resignación o con el sacrificio. Implica un grado de madurez y de sabiduría que no todo el mundo alcanza.
Debemos empezar aceptándonos a nosotros mismos, pero esta sociedad de consumo sólo hace que empujarnos a desear ser otros, creando en nosotros continua insatisfacción.
Creo que el objetivo último de la educación debería ser la felicidad, pero ésta no es rentable ni competitiva. Por esto se educa en la otra dirección...
Buen comentario, Irene.