viernes, 30 de octubre de 2009

*Deja a tu hijo moverse solo, ¡confía!

La demanda extrema de seguridad es perversa: queriendo máxima seguridad para nuestros hijos, se la robamos (¿cómo afrontará la vida quien creció entre algodones?). Son reflexiones que me suscita esta madre en lucha con la mentalidad hegemónica norteamericana (el niño como frágil tacita que te pueden robar o romper). Charlo con Lenore mientras Izzy baja a la calle a dar una vuelta. Lenore ha participado en la jornada de educación vial “¡La calle también es mía!”.
Lenore Skenazy , de 49 años, vive en Nueva York. Dejó a Izzy, su hijo de 9 años, ir solo al colegio... ¡y vaya escándalo!

-¿Estoy ante la peor madre de América?
Ese título me han colgado.

-¡Algo habrá hecho para merecerlo...!
Sí: confiar en la vida, en el mundo, en la gente y en mi hijo.

-¿Confiar?
Confiar en que mi hijo Izzy, a los 9 años, podía ir y volver él solito de casa al colegio.

-¿Y podía?
Claro: desde pequeño ha viajado en metro conmigo y su padre, y días antes de dejarle ir solo, repasamos el trayecto con él.

-¿Y qué decía Izzy al respecto?
Como la mayoría de chavales, él anhela sentirse independiente, autónomo, sentirse mayor: le ilusionaba moverse solo por Nueva York, y sabíamos que tenía plena capacidad para hacerlo. Y le dejamos hacerlo.

-¿Y dónde estuvo el problema, pues?
En que un policía, al verle solo en el metro, le detuvo: "¿Dónde vas solo, tan pequeño? ¿Lo saben tus padres?", le preguntó. No se creyó que le hubiésemos dejado moverse solo por el metro de Nueva York...

-¿Y qué pasó?
Se lo llevó a comisaría y me llamaron a casa.

-Vaya susto, ¿no?
Me sobresalté. Por teléfono le confirmé al agente que yo había permitido a mi hijo salir solo. El policía no daba crédito: "¿Y no le preocupa lo que pueda pasarle a su hijo?", inquiría, atónito. ¡Temí ser arrestada!

-¿Y no le inquietaba que fuera solo?
¿Qué podía pasarle? ¿Ser robado? ¿Agredido? ¿Secuestrado? ¿Violado? ¿Asesinado? ¿Descuartizado? ¡Por favor! Ese modo de pensar tóxico es mayoritario hoy en mi país, con unas consecuencias espantosas...

-¿Qué consecuencias?
Tener tanto miedo a monstruos que atacarán a nuestros hijos ¡convierte a los padres en verdaderos monstruos para sus hijos!

-¿Tanto como eso?
¡Los padres roban a sus hijos la infancia y el gusto por la vida, inoculándoles recelo y miedo! Están encapsulándolos, incapacitándolos para vivir en sociedad. Mire, yo relaté lo sucedido con mi hijo Izzy en mi columna periodística, y asistí a dos reacciones...

-A ver: una...
Se me acusó de desocuparme de mi hijo, de ser mala madre, negligente, perezosa, pasota, culpable de lo que le pasara a mi hijo...

-La peor madre de América, vamos.
Pero la otra cosa que pasó es que recibí cartas de chavales. Le leo una: "Tengo 15 años. Me llevan en coche de casa al colegio, mi vida es ver la tele, videojuegos... Es divertido un rato..., ¡pero no tengo libertad!: no puedo jugar en el jardín porque mis padres tienen miedo a que me secuestren o me maten. ¡No quiero que mis hijos, si un día los tengo, vivan como yo!".

-Se trata de un caso extremo...
No, es común. Cuando yo era niña, correteábamos por la calle, los niños repartían diarios, las niñas de 12 años hacíamos de canguro a niños pequeños, o cantábamos por las casas pidiendo aguinaldos... ¡Nada de eso se permite hoy! Sólo un 10% de los niños de mi país van solos al cole.

-Habrá aumentado la inseguridad...
¡Mentira! El índice de seguridad vuelve hoy a ser el mismo que el de 1963, y Nueva York es de las ciudades más seguras del país.

-Entonces, ¿a qué responde tanta sobreprotección?
La televisión sabe que repetir sucesos luctuosos, crímenes, tragedias, niños secuestrados, una niña asesinada... nos estremece, atrae, magnetiza y vende. Y lo hacen: ¡los repiten sin descanso! ¿Pasa esto en España?

-Estamos en ello.
El efecto de esto es que la gente se queda con un mensaje: "La calle es peligrosa, ¡mi hijo está en peligro!". E incluso algo peor...

-¿Qué?
¡Acabas viéndote a ti mismo como criminal! "Si un vecino me deja a su hijito, ¡qué irresponsable es!, porque yo podría...".

¿Qué medidas tomaría usted si mandase en Estados Unidos?
Que no se arreste y enjuicie -como ahora- a padres que dejan un rato a sus niños solos en casa o les permiten salir solos a la calle.

-Pobres padres...
Y pobres hijos: cosificados, convertidos en inútiles, no sabrán desenvolverse mañana. ¡Démosles la oportunidad de espabilarse!

-¿Cómo?
Déjale que vaya a comprar el pan o el periódico, déjale que complete una vuelta a la manzana en bici él solo, déjale que vaya a comprarse un helado... Enséñale, ¡y suéltale! Ser buenos padres consiste en eso.

-¿Qué otro consejo daría?
Me escribió el otro día un señor de 90 años: "Recuerdo el día en que, con 10 años, me dejaron subir solo al tren...". Tras casi un siglo de intensa existencia, ¡Segunda Guerra Mundial incluida!, al final de su vida, ¿quién era ese hombre, quién había sido siempre? ¡El niño valiente que subió solo al tren...!

-Confianza es el mensaje, ¿verdad?
Confía más en lo que ves que en la tele: ¿secuestran cada día a un niño en tu ciudad?

-¡No!
Pues no lo secuestres tú: ¡tenemos secuestrados a nuestros hijos! Alguien me soltó: "Esta madre prefiere darle a su hijo un día de diversión a una larga vida", ¡dando por hecho que alguien matará a mi hijo!: así de aberrante es la mentalidad estadounidense.

-¿Qué es lo peor que le han dicho?
"¡Ojalá algo horrible le pase a tu hijo, para que aprendas!".

(Entrevista publicada en "La contra" de la Vanguardia).

18 comentarios:

  1. María González Rodríguez 1º Bachillerato (Ciencias)7 de noviembre de 2009, 22:46

    Hola Carmen,

    Estoy de acuerdo con esa madre pero no por completo.

    Primeramente estoy de acuerdo en que si no deja al niño un poco de independencia, éste no se sabrá desenvolver en la vida, ya que si no tiene trato con la gente, no sabe cómo relacionarse, no lo aprenderá y de mayor tampoco se relacionará.

    También estoy de acuerdo en que las noticias solo nos plantean los sucesos malos que ocurren, por ello nos conciencian más de lo peligroso que puede llegar a ser la calle. Por ello no quiere decir que cada vez que salgas a la calle, te va a pasar algo. Pienso que nos sirve como aviso lo que ya le ha pasado a otras personas y nos ayuda a tener más precaución.

    Por otro lado, en el caso del niño de 9 años que plantea su madre, yo en su lugar, no le habría dejado al niño ir por el metro de Nueva York, la acción de esta madre la justifica por la preparación del niño a esta situación, yo en principio no le dejaría, aun estando preparado es muy pequeño, pienso que debería dejarle a una edad más tardía.

    Otro punto es que no hay que inculcar el miedo en el niño, ya que si esto se hace, cada vez que salga se mostrará inseguro, creo que habría que advertirle, pero no meterle miedo.

    María

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  2. Creo María que los padres deben enseñar a sus hijos a ser independientes y autónomos. Educar en el miedo no es sano. Le habían preparado para que supiese moverse solo.No sé si la policía actúa bien metiéndose en estos asuntos, su trabajo es vigilar las calles para que no sucedan delitos. Me pregunto ¿es más segura la calle para un anciano de 70 años? pienso que es tan vulnerable como un niño. Creo que hay un exceso de protección de los padres que está creando hijos con baja autoestima pues no son capaces de enfrentarse a situaciones normales de la vida.

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  3. Irene García Fernández 4ºESOC11 de noviembre de 2009, 17:07

    Hola Carmen, por una parte estoy muy de acuerdo con esta madre ya que como bien dice,tienes miedo a que secuestren a tu hijo, pero.. ¿y tú? tú haces un ejemplo similar, ya que un adolescente no puede quedarse en su casa todo el día viendo la tele o en el ordenador, debe salir con sus amigos, ir a fiestas,pasarselo bien, reirse, y un montón de cosas que se hacen a esas edades, ¿cómo te cres que se siente el chico que le manda la carta a la madre del niño de 9 años? con 15 años un muchacho no puede estar todos los días viendo la tele, jugando a videojuegos,... ese muchacho cuando tenga que ser independiente, irse a estudiar a otra ciudad o país, lo pasará mal, ya que la madre le ha tenido en una burbuja toda su vida (de niño y de adolescente), el niño tendrá hasta miedo de salir a la calle, no madurará lo suficiente como para independizarse totalmente.
    Por otra parte tampoco me parece normal el otro extremo del caso, que con poca edad le dejen hasta altas horas de la noche, o que le dejen hacer cosas no aptas para su edad.
    En ambos casos el desarrollo de la madurez del niño la tienen los padres, y esque tienen mucha resonsabilidad educar adecuadamente a una persona, tener un hijo conlleva grandes esfurzos, responsabilidades y sacrificios, no es tener cualquier cosa. Quién tiene un hijo tiene una vida, y quién tiene una vida tiene una responsabilidad.

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  4. Hola Irene,
    Estoy de acuerdo contigo en que es obligación de los padres educar a los hijos para que sean autónomos y permitirles que convivan con chicos y chicas de su edad. Ser padres es una responsabilidad, y no es adecuado dejar a los hijos frente a la TV. todo el día.
    Ahora, esto va para ti, como soy tu profe y tengo una responsabilidad, te voy a pedir que prestes atención a la puntuación, esto es, uso adecuado de comas, espacios detrás de las comas, uso de los puntos suspensivos, y así tu comentario será casi perfecto, ¿Vale?
    Venga, que tú puedes.

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  5. María González Rodríguez 1º Bachillerato (Ciencias)12 de noviembre de 2009, 16:44

    Hola Carmen,

    Es cierto que hay que educar a los hijos con un grado de independencia en relación a su edad, pero, no estoy de acuerdo con que es igual de vulnerable un anciano y un niño pequeño, la calle va a ser la misma pero, el niño pequeño, al no tener experiencia, no sabe que intenciones tiene la gente, como reaccionar en determinadas situaciones, mientras que un anciano, con toda su experiencia tendrá conocimiento de las cosas, aunque, posiblemente, si es atracado, por ejemplo, no se pueda defender por una imposibilidad física, mientras que un niño si se ve amenazado, podrá echar a correr.

    María

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  6. Gema Nombela Ipiña 4º ESO C19 de noviembre de 2009, 21:16

    Hola Carmen!
    Yo también estoy de acuerdo con esta madre pero no del todo puesto que si que es verdad que los niños no tienen que estar siempre en casa ,viendo la TV o jugando, porque con eso el día de mañana no llegaran a valerse por si solos, no sabrán que hacer ante una situación y no serán responsables, para eso ay que prepararlos muy bien y darlos una buena educación. Pero también pienso que hizo mal por muy preparado que estuviera es un niño muy pequeño para ir por una ciudad tan grande el solo e incluso montarse en tren, tienes razón cuando dices que la policía no debería meterse en estas cosas sino preocuparse un poquito mas por la seguridad de las calles, esto no quiere decir que no valla haber secuestros, ni robos ,violaciones...pero si podrían evitarse un poco mas, eso pienso yo. La verdad deberían de mentalizar a los niños como es el mundo hoy en día pero no anteponerse a dejarles salir y meterlos miedo, deberían darlos un voto de confianza tanto por el bien de ellos como por el de sus hijos.

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  7. Estoy totalmente de acuerdo con la madre,creo que algunas veces a los hijos hay que dejarles libertad e independencia aunque no esta mal tampoco tenerles un poco vigilados o controlados pero no todo el rato encima ya que el adolescente se cansa, y termina pensando que la madre lo unico que la pasa es que no confia en el,que ella piensa que su hijo no se sabe mover solo con 11 o 9 años.Y estoy de acuerdo con gema con lo de la policia, ya que al fin y al cabo es un trabajo que su derecho es vigilar un poco el pueblo en el que vive, ya que si pasan de todo eso lo unico que conseguiran es mas violencia,más violaciones etc..
    Y otra cosa muy importante los niños necesitan que confien en ellos y si una madre esta todos los dias detrás de él continuamente llamandoles el niño acaba agobiandose.

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  8. Bueno, voy a intentar contestaros a todas ya que los comentarios son muy parecidos. Ya sé que es arriesgado dejar solo a un niño en una gran ciudad pero también es peligroso no enseñar a los hijos a valerse por sí mismos. Ante este doble riesgo ¿por cuál decidirnos? yo sigo pensando que es mejor educar hijos autónomos que dependientes, aunque por supuesto todo lleva un riesgo. Pero insisto, estos padres se habían preocupado de enseñar a su hijo a moverse por la ciudad. Los peligros a que le atraquen o le roben están siempre en la calle, te puede suceder de mayor también.
    Gema, por favor, pon atención a las faltas de ortografía y a las comas.
    Silvia, te digo lo mismo, por favor las faltas, los acentos, no se debe escribir en un espacio público que pueden leer incluso niños con faltas de ortografía, vaya ejemplo que les vamos a dar. Por favor, chicas, repasad lo que escribís antes de publicarlo y corregir las faltas.
    Si no poneis atención dejaré de tener en cuenta vuestros comentarios y los borraré aunque sólo sea para no dar mal ejemplo. Insisto, hay que escribir bien, esto es lo primero.
    Lo segundo, no es lo mismo una opinión que un parecer, las opiniones hay que fundamentarlas con ejemplos, datos, pensamientos de personas especializadas o películas, en fin, con argumentos, sino, se convierten en opiniones subjetivas que no se pueden discutir, o si se discuten no llevan a nada. El diálogo pretende convencer, encontrar juntos la mejor opción o la opinión más acertada. Así pues, hay que esforzarse en fundamentar las opiniones que arrojais en vuestros comentarios. Ánimo que no es tan difícil hacer las cosas bien.

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  9. Bea Gutiérrez Colino 4ºA10 de diciembre de 2009, 22:32

    Pero yo creo, que cuando la madre o el padre, va todo el rato detrás del niño, agobiándole, no dejándole respirar y todo eso, lo hace de manera involuntaria, ya que lo único que quiere es que su hijo esté seguro y no le pase nada. Lo hace queriendo, pero a la vez sin querer; queriendo, porque es consciente de que lo que quiere es protegerle, quiere que no le pase nada, que este seguro y tal; y sin querer porque lo hace de manera inconsciente, no se da cuenta de que es un agobio para el niño. No sé si me he expresado bien.

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  10. Hola Bea, te has expresado perfectamente. Pero cuando los padres se preocupan excesivamente por los hijos, en realidad, lo que quieren evitar es sufrir. Me explico, se sienten más seguros ellos porque piensan que así no les pasará nada y con ello evitan sufrir. Pero ¿qué pasa con su hijo? ¿se lo plantean? tener hijos no significa no sufrir, sino prepararles para enfrentarse a la vida y esto a veces significa pasarlo mal y permitir que el hijo se equivoque y pueda, no necesariamente, sufrir.

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  11. Bárbara Cabanillas Arevalillo 4º A14 de diciembre de 2009, 16:26

    En mi opinión, cuando unos padres intentan proteger a su hijo, tenerle como en una burbujita de cristal para que no le suceda nada, para que esté protegido como el que más, qe no sufra en ningún momento, etc. Lo que suele pasar es que el hijo se agobia hasta el punto de hacer justo lo contrario de lo que debe hacer. ¿Y por qué suele pasar eso? Porque los padres, para intentar que el niño viva lo mejor posible y sin sufrimientos, intentan hacer todo lo que ellos pueden, y esto no debe ser así, ya que no dejarán al hijo vivir su infancia cometiendo los errores que la gran mayoría del mundo comete cuando es pequeño, entonces, al no dejarle tener esos errores, el niño en cierto modo no sufre, pero tampoco aprendera de dichos errores.

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  12. Así es, Bárbara. Hay que cuidar y proteger a los hijos, pero también permitirles que vayan descubriendo la vida y se equivoquen. Sólo de este modo, como bien dices, aprenderán. Esto no significa que se les pueda permitir todo. Hay situaciones que, si podemos, debemos evitar que pasen. Pero hay otras que han de vivir. Lo importante es crear un vínculo de afecto y confianza tal, que los hijos se sientan capaces de contar a sus padres lo que les va ocurriendo, y los padres puedan aconsejar y expresar su opinión, pero sin imponer su criterio a toda costa. Hay experiencias que a los hijos, dada su edad, les va a tocar vivir y, a veces, hasta sufrir. ¡Hay que dejar que los hijos crezcan y se vayan responsabilizando de sus vidas!

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  13. Perdona puesto que no se como borrarle lo pego de nuevo ya que corrigiendo unos fallos sin querer hice otros.
    Cómo va a ser la vida de una persona criada entre algodones…pues mala, no sabe a lo que se enfrenta ahí fuera. Los padres deberían preocuparse más por intentar enseñarte los valores éticos correctos y dejar que los lleves tú a la práctica no pueden pretender estar en todo momento encima tuya porque eso ni es vida ni es nada.

    El texto es un poco extremista pero bueno tiene razón. No puedes tener a tu hijo en una burbuja. Yo desde pequeño he ido al colegio solo, ¿eso significa que sea mala mi madre? A mi me parece que no, mi madre ha confiado en mi desde el primer momento, tampoco la he dado motivos para desconfiar, pero sabe que si algún día me pasa algo no será por su culpa, ella me ha enseñado a desenvolverme en todo tipo de situaciones para no necesitar que estuviera en todo momento y creo que esa debería ser la finalidad de todo padre, que cuando ellos nos falten, sepamos valernos por nosotros mismos.

    Hay padres y madres que tienen a sus hijos tan sumamente amedrentados que no les dejan ni si quiera cortarse el filete. ¿Significa esto que dichos padres son mejores que los que dejan a sus hijos ir solos al colegio? Yo creo que no.

    Si, la vida no es que sea un campo de rosas desgraciadamente, pero sobreprotegiendo a tus hijos, también eres delincuente ya que le cohíbes de su libertad.

    Un saludo

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  14. No te preocupes, Moisés:

    un comentario ya insertado sólo lo puede borrar la administradora del blog; en este caso, yo. Y como ves, ya lo he hecho, dejando el que deseabas.

    Es cierto que una persona “criada entre algodones” es difícil que llegue a madurar y a formarse un carácter autónomo y templado para enfrentarse a los retos y dificultades que la vida, de un modo u otro, le pondrá.

    Los padres –por lo general- quieren que sus hijos sean buenas personas, útiles a la sociedad y que adquieran una profesión u oficio con el que puedan ganarse la vida.
    Pero la tarea de ser padre no es nada sencilla. Porque no basta con querer a los hijos para educarlos. Se necesitan otras cualidades, una preparación, una seguridad… Al fin y al cabo, no educamos con lo que decimos, sino con lo que somos.
    Por esto, los padres también han de crecer como personas. Y los hijos han de quererlos y respetarlos a pesar de sus imperfecciones o limitaciones.
    ¿Hay que confiar en los hijos? Sí, claro. Pero también los hijos han de responder a esa confianza. Porque en la vida real, o eres una persona en la que se puede confiar, o nadie apostará un céntimo por ti. Confianza y responsabilidad siempre van juntas.

    Los padres –porque eso se lleva en la sangre- siempre tienden a proteger a sus hijos. Es verdad que algunos no distinguen la diferencia entre proteger cuando es necesario, y ahogar a su hijo no permitiéndole que corra el menor riesgo.
    Bien, pero a los padres también hay que ayudarles a comprender algunas cosas que se les escapan, y yo creo que el diálogo es la fórmula más eficaz para ello.

    Tines razón, sobreproteger a los hijos no es nada bueno. Es más: es negativo.
    Y de los padres que actúan así se puede decir que se equivocan; pero no que son unos delincuentes. Ahí te has pasado un pelín, Moisés. No seas tan duro.

    Como ya conoces mi insistencia en el correcto uso de la ortografía, te dejo tres correcciones, con ejemplos:

    1ª. "Sé", cuando pertenece al verbo saber, se acentúa.

    (Ya sé que se está bien en casa).

    2ª. "Mí" cuando es sujeto, se acentúa.

    (Mi coche es sólo para mí).

    3ª: "Sí", cuando estás afirmando algo, también se acentúa.

    (Sí que iré al cine, si tú también vas en tu moto).

    Analiza con atención estas frases, para que entiendas cuándo un mismo término lleva acento o no.

    Saludos.

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  15. Sí, los padres suelen tender a proteger a sus hijos, me parece algo normal pero cuando alguna cosa es excesiva no suele ser buena.
    Claro que quieren el bien para sus hijos para eso no necesitas ser padre para querer el bien de una persona. Ellos sólo pueden intentar darte una buena educación y enseñarte a defenderte en la vida, que no quieran pretender el vivir nuestra vida como si fuera la suya. Con esto no quiero decir que nuestra vida no les debe importar sino que ellos deben dejar que nosotros nos equivoquemos y aprendamos de dichos errores.

    Depende como tomes tú la palabra delincuente, yo la tomo como persona que comete algún delito y yo creo que el sobreproteger a tus hijos hasta el punto de que acabas con su libertad para mi es un delito, es mi parecer.

    Gracias por la corrección, se me debió pasar intentaré estar más atento.

    Nos vemos.

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  16. Moisés:

    Por supuesto que “delincuente” es aquel que comete delito. La cuestión es: ¿quién determina qué actos son o no son delictivos? No lo determinamos ni tú ni yo, sino los jueces encargados de instaurar las leyes.

    No todo lo que está mal es delito. En el caso de estos hipotéticos padres sobreprotectores, está claro que no le están haciendo ningún favor a su hijo. Pero, ¿no crees que su manera errónea de ejercer de padres es más producto de la ignorancia que de la maldad?

    Yo no creo que ningún padre sobreprotector actúe de este modo con la intención de dañar y hacer infeliz a su hijo. Y por tanto, no habiendo mala intención, ni siquiera se le podría acusar de actuar de forma inmoral.

    Seguro que hay casos de sobreprotección muy extremos, en los cuales los Servicios Sociales, en defensa de los derechos del niño, se ven obligados a intervenir, y hasta es posible que un juez determine quitar a esos padres la custodia de sus hijos.
    Pero cuando esto ocurre, es porque el juez declara la incapacidad de esos padres de ejercer como tales y de garantizar el desarrollo normal de sus hijos. Pero nunca por considerar que dichos padres estén incurriendo en un delito, como sí lo hacen, en cambio, los padres que maltratan a sus hijos, que no los alimentan, que los abandonan a su suerte, que los venden…

    En conclusión: sobreproteger a los hijos es un grave error que los perjudica, impidiéndoles su normal desarrollo, pero no es un delito.
    Y si alguien acusara a unos padres sobreprotectores de ser unos delincuentes -fíjate que paradoja-, sería tal persona la que estaría incurriendo en un delito: el de injuria.

    Bueno, Moisés, ha sido un interesante debate. No espero haberte convencido, aunque sí aspiro a que saques alguna nueva reflexión que torne tu opinión algo más flexible, menos radical.

    Saludos.

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  17. Nuria Santacruz Molina15 de abril de 2010, 23:56

    Hola Carmen: no sé si me repetiré, porque no he leido los comentarios de los demás, pero yo opino muy parecido a la madre de este texto. Si tu nunca concedes un poquito de libertad a tu hijo o no le ayudas a valerse por sí mismo en la calle él nunca sabrá defenderse ante cualquier problema.

    Respecto a este tema, yo creo que mis padres me están ayudando mucho, ya que desde pequeñitas mi hermana y yo, de vez en cuando, nos quedábamos solas en casa porque mis padres salían o porque estaban trabajando. También nos han enseñado que no siempre ellos van a poder estar a nuestra disposición para comprar tal cosa o ir a tal sitio, y que por eso, debemos buscarnos la vida con autobuses, trenes, etc. Sé que no es lo mismo una gran ciudad, como Nueva York, que un pueblo, como Santa Olalla, pero la idea es la misma, ayudarnos a ser cada vez más independientes. Aunque antes me quejaba por tener que hacerlo yo sola, ahora estoy bastante agradecida con ellos, aunque no siempre todo es color de rosas.

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  18. Hola Nuria,

    Primero de todo, me alegra mucho tu intervención en el blog, y espero que no sea la última vez, pues puedes aportar opiniones muy sensatas.

    Es verdad que es conveniente, cuando comentas un texto, leer primero los comentarios anteriores, no tanto por no repetirte (pienso que no existen situaciones o experiencias idénticas, sólo similares), sino porque del mismo modo que tu opinión o vivencia enriquece a los que la leemos, las anteriores, hechas por otras personas, también pueden aportarte una visión provechosa para ti. Pero esto es tan sólo una sugerencia.

    Me ha gustado mucho tu comentario por lo que dice y por el modo en el que está redactado. Te expresas muy claramente y, además, la experiencia propia que cuentas es muy positiva. Siempre alegra saber que hay padres que saben ayudar a sus hijos a ser personas autónomas y responsables.

    Es verdad que una gran urbe como Nueva York no es comparable en muchos aspectos a la vida de un pueblo. Pero el riesgo está en todas partes. Y educar en la autonomía responsable y en la prudencia, tan necesario es hacerlo en Santa Olalla o Torrijos como en New York City. Así que estoy totalmente de acuerdo con tu visión de este tema, y puedes estar orgullosa de tus padres.

    Ya, Nuria, sólo me queda felicitarte por tu nivel ortográfico. La verdad es que alegra encontrar estudiantes con tan buen uso de nuestra lengua.

    Un saludo y... espero que seas generosa y sigas regalándonos alguna que otra aportación de tanto en tanto.

    Un saludo, Nuria.

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