martes, 13 de octubre de 2009

*Vencer el trauma a través del arte (I)

Boris Cyrulnik (Bordeaux 1937), uno de los fundadores de la etología humana, es una autoridad indiscutible en una materia de nombre extraño: la resiliencia o capacidad del ser humano para superar el trauma, cuestión que Cyrulnik conoce bien pues lo ha experimentado en carne propia: vivió el apogeo del nazismo siendo un niño judío de seis años, perdió a sus padres y creció en un orfanato. Hasta los once años no pisó una escuela.
En esta entrevista, Cyrulnik disecciona las herramientas sociales e individuales de las que disponemos para la curación de las heridas emocionales, y dice que no hay vía más eficaz que la expresión artística para empezar a tratar el dolor profundo.
Dos de sus libros más recomendables son "Los Patitos Feos" y "Autobiografía de un espantapájaros".

-¿Qué o quién puede ser herramienta de resiliencia, la escuela o el maestro?
Los niños maltratados son malos alumnos porque la escuela no tiene sentido para ellos; el teorema de Pitágoras resulta absurdo a alguien preocupado por lo que va a ocurrir en su casa esa noche. Sólo un niño de cada diez se refugia en la escuela y se convierte en un buen alumno, pero cuando eso ocurre tiene que haber un profesor que le tienda la mano. Si establece una relación afectiva con un profesor, el mal alumno recupera su retraso en tres meses. Es decir, que ni escuela ni profesor tienen en sí mismos una función de resiliencia, sino que ésta depende del significado que ambos tengan y del papel protector que jueguen para ese niño.

-En su libro, habla de diferentes obediencias. ¿Cuál cree que propicia la escuela actual, la obediencia socializante o la perversa?
La definición actual de perversión es la de “un mundo sin los otros”. Sólo cuenta mi mundo, usted no existe, no es persona. Me divierto con usted y si usted sufre, es divertido. Eso es la perversión. La Iglesia cree que es perversión tener relaciones sexuales sin intención de tener un hijo. ¡No tiene sentido! Después vino la definición médica de perversión, como una alteración hormonal. Tampoco tiene sentido. La única definición buena de perversión es la del narcisismo perverso: sólo cuento yo, usted no cuenta, usted es un monigote, una sombra.

-Pero ¿qué relación tiene eso con la escuela?
Podemos ser pervertidos por una cultura, lo que llamamos una estructura perversa. Le contaré algo: después de la Segunda Guerra Mundial, en Francia e Italia hubo muchos huérfanos que fueron acogidos en instituciones católicas, judías o laicas. En algunas de esas instituciones católicas, y en las judías, muchos comenzaron procesos de resiliencia y fueron muy buenos alumnos, mientras que de los acogidos en las laicas muy pocos fueron a la escuela y todos fueron malos alumnos.
Veamos las diferencias. En la institución católica les decían: "eres huérfano, no vale la pena que estudies, pero es muy importante que aprendas un oficio y que formes una familia". Y eso es lo que hicieron, aprendieron un oficio humilde y formaron una familia y su desarrollo psicológico y afectivo es excelente.
En las instituciones judías les decían: “han matado a vuestros padres, vuestra cultura ha sido destruida, os consideran infrahumanos; debéis demostrar que no es cierto”. Fueron excelentes alumnos, hay varios premios Nobel entre esos niños, grandes escritores y muchos psiquiatras y psicólogos, pero siguen siendo personas traumatizadas que aún sufren por el exterminio.

-¿Quiere decir que no son compatibles el éxito profesional y el personal?
Hablo de lo que sucedió en esas instituciones y en ese contexto. Si las comparamos, en la institución católica no hay mucho éxito social ni intelectual, pero sí un gran éxito afectivo y relacional; mientras que en la judía hay mucho éxito intelectual y social, pero no arreglaron su problema. Así que podemos hablar de más resiliencia en la institución católica. Pero en ambas se consideraba que la existencia del niño en la tierra tenía un sentido. En las laicas, en cambio, se ocuparon de ellos como si no fueran personas porque no les permitían contar sus historias, los hacían callar. Hicimos el seguimiento de algunas cercanas a Lyon y constatamos muchos suicidios, muchos accidentes, casi ninguna escolarización y muy pocos buenos resultados.

-¿Qué puede hacer la escuela para facilitar el desarrollo de un niño traumatizado?
Hay que verlo en términos evolutivos. Lo que hiere a un bebé es la pérdida afectiva, la pérdida sensorial. Los niños abandonados en sus primeros meses detienen su desarrollo biológico y cerebral; sufren una atrofia frontal y de la cara profunda del cerebro que hace que no hablen, que se balanceen todo el tiempo y que no puedan aprender nada, ni siquiera a convertirse en humanos, porque no hay alteridad. Si dejamos a esos niños solos, no habrá resiliencia, porque en la condición humana no puedo convertirme en mí mismo sin alguien a mi lado. Si un bebé es privado de entorno afectivo, sensorial, muere.
Si no muere físicamente, su cerebro se atrofia y es pseudo-autista. La resiliencia de un bebé necesita de un sustituto de la madre, otra mujer o un hombre; aunque una institución pueda ocuparse de él, necesita un sustituto maternal.
Si el mismo trauma aparece más tarde,cuando el niño habla, entre los cinco y los diez años, va a ser un niño triste, que sufre, no tanto por la pérdida de sensibilidad sensorial, sino por la representación que tiene de ser menos que los otros porque “ellos tienen mamá y yo no”. En ese momento, hay que hacer un trabajo de mentalización. Los niños que son capaces de soñar, de pensar, de tener sentido del humor, de hablar con alguien, desencadenan más fácilmente que los otros un proceso de resiliencia, un nuevo modo de desarrollo. Por el contrario, los niños que no hablan, porque no son capaces o porque los adultos los hacen callar, no pueden desarrollar un mundo íntimo ni desencadenar su resiliencia. Vemos, por tanto, que es la transacción entre los medios afectivo, verbal, social y cultural, lo que permite al niño retomar el desarrollo.

-Le propongo una hipótesis: un niño de corta edad pierde a su madre en el 11-M. Hay compañeros de clase que lo saben y otros que no, ¿cómo debe actuar el maestro para facilitar la resiliencia de ese niño y la del colectivo que conoce la tragedia?
No hay que hacer hipótesis. ¿Puedo decir que algo así me sucedió a mí o está mal visto en España? (ríe). Yo perdí a mi familia durante la guerra europea, y cuando acabó, se hacía callar a los niños que habían sufrido la pérdida de familiares porque eso, decían, impedía la reconciliación. Mis amigos del instituto no sabían lo que me había pasado, porque yo nunca hablaba de ello. Un día, que celebrábamos la liberación de Francia, el director (que sí lo sabía, claro) me pidió que llevara un ramo de flores porque era el único de la clase que perdió a toda su familia. De pronto, mis compañeros descubrieron que yo no era como ellos. Ese director quería hacerme un honor, pero mis compañeros de clase me consideraron, a partir de entonces, como alguien inferior. Ellos tenían una familia y yo no.
Las malas soluciones para tratar el atentado del 11 de marzo son dos: la primera no hablar de ello, porque se sufre a escondidas; la segunda hablar de ello porque te convierte en alguien distinto, un poco monstruo. Te hace ser como un fantasma.

-Entonces, ¿cómo hacerlo?
Dando la palabra a los artistas. Una novela, una película, una obra de teatro, un ensayo filosófico que permita al herido no hablar de sí mismo (que le resulta demasiado difícil), sino de un representante. Son lo que llamo autobiografías en tercera persona.
En el caso de los niños del 11 de marzo, no hay que hacerles que cuenten lo que les pasó, eso les va a hacer sufrir de nuevo, ni hacerles callar porque necesitan hablar, pero deben hacerlo a través de un dibujo, por ejemplo.

(Entrevista publicada en "Cuadernos de pedagogía", nº 393).

14 comentarios:

  1. Pues yo creo que se les devería dejar a ellos mismos que hablen o digan a sus amigos lo que les paso a sus padres eso si dandoles motivaciones para que desarrollen sus cualidades en la escuela Victor Martin ROdriguez

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  2. María González Rodríguez 1ºBachillerato (Ciencias)17 de octubre de 2009, 17:42

    Hola Carmen,

    A mi parecer todo niño maltratado necesita apoyo en su "resiliencia" como dice en el texto. Creo que en la sociedad de hoy en día hay mucha perversión, ya que, por ejemplo en la televisión, que es bastante culpable de ello, nos reímos de las desgracias que les ocurren a otras personas.

    En el texto nos habla de las formas de educar en la Segunda Guerra Mundial, pues bien, la más correcta bajo mi punto de vista, sería la católica, porque de poco te sirve tener mucho éxito en el trabajo, si en el ámbito familiar no eres feliz. Para mí es más importante ser feliz que tener un puesto muy importante de trabajo, ya que si tú estás en un trabajo en el cual disfrutas, eso es lo que realmente cuenta.

    En cuanto a vencer el trauma por medio del arte me parece una buena idea, ya que por ejemplo si un niño queda traumatizado y no habla es su única forma de expresar sus sentimientos, me parece muy productivo. Lo peor sería hacerles callar a esos niños y que se guarden lo que tienen dentro, ya que tarde o temprano les acabará afectando, y quizás mucho más que si lo hubiera expresado antes.

    El autor tiene razón cuando dice que si no tienes padres eres diferente a los demás pero en lo que no estoy de acuerdo es que dice que si no tienes padres eres inferior. Con esa frase no estoy de acuerdo para nada. ¿Vas a ser mejor o peor por no tener a dos miembros de tu familia? Yo pienso que no.

    Pienso que a través del arte se hace más fácil afrontar ese problema, y poder contárselo a las personas que te apoyan, que te puede ayudar mucho.

    María.

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  3. Débora 1º Bachillerato (Ciencias)17 de octubre de 2009, 19:03

    Hola Carmen.
    Estoy totalmente de acuerdo con el pensamiento de Cyrulnik, es cierto que un niño que no tiene figura maternal, familiar, o a sufrido algún accidente respecto con sus padres, se traumatiza encerrándose en su mundo, y si no es feliz, lo que menos le importa es rendir bien en el colegio.
    Si no reciben ninguna ayuda o apoyo, estos niños terminarán destrozando su vida, por eso hay que motivarlos, tanto en el ámbito afectivo como profesional, como hacían las escuelas católicas y judías, para que estos niños consigan seguir adelante y tener una vida feliz.

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  4. Hola Carmen
    Me ha gustado mucho la entrevista del autor, pienso que los traumas mal tratados producen porblemas irreversibles en los adultos.
    Creo que la forma de expresar tus problemas a través del arte es un método muy eficaz,pero es mucho más fundamental tener cariño y ayuda emocional para poder salir adelante, sólo, no puedes conseguirlo.

    Rodrigo Jiménez de los Galanes 1ºBachiller CCNN

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  5. Laura Jiménez 1º Bach. CCNN20 de octubre de 2009, 21:00

    Hola Carmen.

    Creo que para llevar a cabo una actitud de resiliencia en un bebé o un niño, es necesario que éste tenga un apoyo emocional que le ayude a afrontar sus problemas y a olvidarlos por momentos. Necesita sin duda una figura materna con la que sentirse querido.

    Sin embargo, para que un adulto pueda vencer su trauma, pienso que es totalmente necesario contarlo y en ningún caso sufrir a escondidas. Para ello, hay que tratar con personas adultas no sólo en edad, sino también en cuanto a la madurez; y una persona madura no es la que se ríe del infeliz evadiéndose de él.

    Eso más bien, sería una persona perversa, una persona que necesita meterse con los problemas de los demás para poder divertirse o alcanzar un grado de felicidad. Pero, ¿quién ocupa un papel menos digno? Sin duda, bajo mi punto de vista, el perverso; aunque él no sea consciente o no sea capaz de reconocerlo, ya que sólo cuenta él y el otro no es importante, es inferior.
    Estoy, por tanto, totalmente de acuerdo con el pensamiento de Cyrulnik.

    Sin embargo, no comparto la opinión que defiende la Iglesia. ¿Por qué hay que mantener relaciones sexuales exclusivamente cuando buscas un hijo? ¿Acaso no es una forma de manifestar el amor o el afecto que sientes por la otra persona, cosa que dicha institución defiende?

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  6. Hola Carmen:
    Estoy de acuerdo con la opinión de Cyrulnik, creo que es imprescindible que para que un niño pueda superar un trauma reciba apoyo y cariño en su día a día, sino es imposible que se recupere del golpe sufrido y se desarrolle como persona en todos los aspectos de su vida.
    Con respecto a la manera en que tratan a los huérfanos las distintas instituciones, creo que la mejor es la católica, ya que hay más resiliencia, y aunque de las instituciones judías hayan salido premios Nobel o buenos psicólogos y psiquiatras para mí es mucho más importante tener un buen desarrollo psicológico y afectivo que ser rico o reconocido en el mundo.
    También pienso que Cyrulnik tiene razón en que el arte es la mejor forma para facilitar la resiliencia, pero al igual considero recomendable que el niño exprese alguna vez sus sentimientos en el momento y con la persona adecuados, ya que esto también ayudará a la superación del trauma puesto que le permite desahogarse y guardarse todo para sí mismo.
    Hasta otra. Marta 1ºBachillerato(Ciencias)

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  7. No estoy de acuerdo cuando dice que una mala solución para tratar una perdida sea hablar de ello u ocultarlo a tus amigos.
    Los amigos son un apoyo para estas situaciones,tanto si esa persona habla sobre el tema con ellos como si no,puede que le sigan tratando como siempre han hecho o que le traten con más tacto por la desgracia que le haya ocurrido, pero no creo que, como expresa en el texto, que le comiencen a tratar como un monstruo, pues deberian ser personas muy injustas y egoistas para llegar a hacerle eso a un amigo.

    Kati.

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  8. Delia Isabel Lopez 4ESO24 de octubre de 2009, 10:59

    Yo estoy de acuerdo con Boris Cyrulnik ya que los niños que son maltratados les falta cariño por que no saben lo que es un abrazo o también los niños como bien a dicho él se han quedado sin padres y no tienen cariño. Estos niños tienden a ser tristes y muy problematicos, por lo que hay que hacerles expresarse de otros modos que no sea el habla.

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  9. El texto deja claro la definición de resilencia, que ,a mi entender, es o el tema o uno de los temas fundamentales de este texto.Aunque yo veo algunos puntos negativos en el texto como la exageración llevada a cabo sobre la actuacion de las instituciones cristiana,judía y laica y sobre sus resultados.No creo que tratasen a TODOS los niños tal y como dice, creo que generaliza bastante tanto en el trato como en el resultado(no creo que todos los niños tratados por la institución laica no crecieses como persona y no tuvieran éxito social ni laboral).Y me ha llamado mucho la atención el comentario sobre el silencio que se les obligaba a mantener a esos niños traumatizados huérfanos por el nazismo,ya que, impedía la reconciliación entre los países.Quiero resaltar que me molesta mucho ese silencio ocasionado allí y en nuestro franquismo ante cualquier incidente perjudicial para el gobierno.Resaltar también que me parece muy noble por parte de Cyrulnik nombrarlo para que no se nos olvide que el mundo no es todo alegría y no todo es como lo pintan.

    Marcos Alonso Díaz, 1º Bachillerato(LETRAS)

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  10. En primer lugar felicitaros a todos por vuestros comentarios.Y paso a comentar algunas cosas, por ejemplo a Katia, creo que no has leído bien el texto, deberías volver de nuevo y ver lo que has comentado.
    Con respecto a lo que dice Laura sobre las relaciones sexuales de la Iglesia creo que según la doctrina cristiana se aceptan las relaciones sexuales como expresión de cariño mutuo y no sólo para tener hijos.
    Con respecto a lo que dice Marcos sobre las instituciones católicas, judías y laicas no creo que deba entenderse que las laicas sean malas sino que son más completas la católica y la judía, pues ayudaban a los niños dándoles un sentido.Así al menos lo entiendo yo.

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  11. Mavile 1º Bachillerato (Ciencias)2 de noviembre de 2009, 19:52

    Hola Carmen:

    Estoy de acuerdo con la opinión de Boris Cyrulnik, ya que superar un trauma através del arte es una buena solución, creo que hay que expresar la emociones ya sea de forma verbal o mediante el uso del arte y como dice Cyrulnik no es muy recomendable hacerlo de forma directa. A las personas que sufren un trauma hay que darles mucho cariño, compresión y paciencia, para ayudarles, como han dicho algunos de mis compañeros.

    La Iglesia cree que es perversión tener relaciones sexuales sin intención de tener un hijo. Creo que esta definición de la Iglesia esta mal interpretada por Cirulnik.

    La mayoría de las personas son narcistas, ya que actúan pensando solo en ellos mismos.

    De las tres instituciones me quedo con la católica, pero creo que es, ¡también importante el estudio seas huérfano o no! Ser huérfano no tiene nada que ver con los estudios, los estudios se realizan por tu propio interés por el saber.
    Hasta otra.

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  12. Hola Maville,
    Ya explicamos en clase las diferencias de significado entre ególatra o narcisista, egocéntrico, y egoísta ¿Te acuerdas? creo que deberías repasarlo ya que observo que aún no lo tienes claro.
    En cuanto a la opinión de Cyrulnik sobre lo que piensa la iglesia en torno a las relaciones sexuales, yo tampoco lo comparto y lo dije en el anterior comentario. Sin embargo me parece muy interesante el sentido que le da él a la palabra perversión, un mundo donde los otros no existen. Además utiliza aquí el término narcisismo perverso, ya ves, tiene que ver con lo que tu dices en tu comentario, no dice narcisista, persona vanidosa o presumida, sino que añade la palabra perverso, es decir, es preciso que, se una el estar enamorado de uno mismo con no tener ojos para los demás, es decir, que sólo existas tú, entonces sí podríamos hablar de egoísmo. Espero que te haya aclarado mi explicación.
    Y por último sólo añadir que amar la sabiduría debería ser una tarea para todo ser humano, y digo amar la sabiduría y no estudiar ya que desgraciadamente hoy muchos estudiantes no aman saber.
    Me alegra que te hayas decidido a hacer comentarios en el blog y me gusta mucho que participes en clase. Sólo comentarte que prestes atención a algunas erratas que has cometido a la hora de escribir, porque estoy segura de que te encanta hacer las cosas bien.

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  13. Iván León 1ºBachillerato17 de febrero de 2011, 16:59

    Hola Carmen, a mí, lo que me gusta esta entrevista, es la forma de solucionar el problema, en un principio pensaba que decirle al niño que su padre era una mala persona, era lo mejor forma de ayudar al niño, pero tras leer el texto, me dí cuenta de que si tu le dices al muchacho, tu padre es un monstruo, él se siente mal, y piensa que su padre es un monstruo por su culpa y esto lo único que hace es empeorar la situación ya que provoca un malestar familiar que hace que posiblemente el hijo de mayor sea como su padre, porque es a lo que él ha estado expuesto durante mucho tiempo.
    La idea de hacerles expresar sus sentimientos a través de dibujos está muy lograda, porque haces que el niño inconscientemente te diga como está y se sienta mejor, ya que a mí al menos decir las cosas que pasan me hacen sentirme más libre y más contento conmigo mismo.

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  14. Hola, Iván León:

    Es verdad lo que dices: la figura del padre y de la madre son sagradas para los hijos, y nadie que pretenda ayudar a un niño maltratado por sus padres (o por uno de ellos) debe presentar una imagen monstruosa de ellos. Sí debe protegerse a los niños de padres así, pero del modo en que lo explica Cyrulnick.

    Claro, el arte nos ayuda a todos a expresar sentimientos para los que no hay o no encontramos palabras, sobre todo en la infancia, cuando aún no tenemos un gran dominio del lenguaje.

    Hablando de lenguaje, te animaría a que escribas más, porque aún puedes mejorar mucho. Te iría muy bien obligarte a leer un libro al mes (del tema que te interese, o novelas, que las hay fantásticas), y de este modo, a la vez que disfrutarías y adquirirías más conocimientos, tu modo de redactar iría mejorando sin casi darte cuenta. Pero has de querer hacerlo.

    Un saludo.

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