miércoles, 2 de junio de 2010

*Carta de un hijo a un padre

No me des todo lo que te pida,
a veces sólo pido para ver hasta cuánto puedo tomar.

No me grites, te respeto menos cuando lo haces,
y me enseñas a gritar a mí también, y yo no quiero hacerlo.

No des siempre órdenes.
Si en vez de órdenes a veces me pidieras las cosas
yo lo haría más rápido y más a gusto.

Cumple las promesas, buenas o malas.
Si me prometes un premio dámelo, pero también si es castigo.

No me compares con nadie, especialmente con mis hermanos.
Si me pones por encima de los demás alguien va a sufrir,
y si me pones por debajo seré yo quien sufra.

No cambies de opinión tan a menudo sobre lo que debo hacer:
decídete y mantén esta decisión.

Déjame valerme por mí mismo,
sí tú lo haces todo por mí yo nunca podré aprender.

No digas mentiras delante de mí ni me pidas que las diga por ti,
aunque sea para sacarte de un apuro;
me haces sentir mal y perder la fe en lo que me dices.

Cuando yo hago algo malo no me exijas que te diga por qué lo hice,
a veces ni yo mismo lo sé.

Cuando estés equivocado en algo, admítelo
y crecerá la opinión que yo tengo de ti,
y me enseñarás a admitir mis equivocaciones también.

No me digas que haga una cosa si tú no la haces:
yo aprenderé y haré siempre lo que tú hagas, aunque no lo digas,
pero nunca haré lo que tú digas y no hagas.

Enséñame a amar y a respetar a los otros,
no importa si en el colegio me quieren enseñar
porque de nada vale si yo veo que tú no amas ni respetas.

Cuando te cuente un problema mío no me digas:
"no tengo tiempo para boberías" o "eso no tiene importancia";
trata de comprenderme y ayudarme.

Y quiéreme. Y dímelo. A mí me gusta oírtelo decir
aunque tú no creas necesario decírmelo.

8 comentarios:

  1. Hola Carmen. Voy a dar mi opinión sobre cada apartado en parrafos en el mismo orden en el que está puesto aquí:

    Muchas veces pedimos a los padres por pedir, aun sabiendo que no van a acceder, simplemente por intentar negociar con ellos, pero a veces ellos mismos se pasan con la reacción cuando se lo pides.

    Siempre que discutes con tu padre y quiere llevar razón, grita más, y cuanto mas grita menos le escuchas y hace que te enfades y tú tambien grites, y terminas por hablarle mal y conseguir incluso que te castiguen por intentar defender tus opiniones o puntos de vista.

    A nuestra edad las ordenes lo vemos como algo impuesto y obligado "por huevos" (perdona mi expresión pero yo lo veo así) y eso nos desagrada mucho y más aun sabiendo nuestros padres que las cosas cuando se piden se hacen con más gusto que cuando te obligan y lo haces enfadado, además de conseguir que lo hagas mejor que si estubieras enfadado.

    Yo no veo muy bien recompensar ciertas cosas, porque muchas de ellas son tu obligación, por ejemplo, aprobar todas las asignaturas, el premio debería de ser si sacas buenas notas y el castigo si suspendes varias asignaturas, ya que muchas veces los padres siempre ponen por medio un premio para que hagas algo o una amenaza de castigo si no lo haces, y desde mi punto de vista no lo veo bien porque haces las cosas por conveniencia o por ahorrarte un castigo.

    Odio cuando los padres te comparan con alguien solo en los aspectos que a ellos les interesa, además de que no todos tenemos las mismas cualidades para hacer ciertas cosas, además de eso te molesta porque te sientes despreciado por tus padres.

    Estoy de acuerdo con que los padres no deben de cambiar de opinión continuamente sobre nuestros actos, porque un dia puedes hacer algo y no les siente mal, tu te confías y a la proxima vez que lo haces te cae la del pulpo.

    Creo que los padres deberían de dar algo más de libertad a sus hijos, y dejarnos que nos equivoquemos porque de los errores se aprende y porque mas libertad significa más responsabilidad y debemos aprender a valernos por nosotros mismos algún día.

    Si a nuestros padres no les gusta que les mintamos, no veo bien que cuando ellos mientes tengas que incubrirle porque se está engañando a si mismo.

    Siempre que tus padres te regañan por tontunas, porque has hecho algo mal y ni siquiera te has dado cuenta y te regañan como si hubieses hecho algo muy malo, ni siquiera sabes porque lo has hecho, simplemente no te has dado cuenta o no has prestado atención en ello.

    Siempre tus padres quieren que no tengas errores y que si los tienes los admitas, pero si ni ellos mismos los admiten no conseguirán que nosotros los admitamos, pues no nos están dando buen ejemplo.

    Si tus padres no respetan ni te respetan, desde pequeño no aprendes a respetar, el respeto de un padre hacia su hijo me parece algo muy importante sobre todo cuando quieres contarle algo debe de escucharte y darte su opinión, si pasa de ti te sientes menospreciado por tu padre.

    Que tus padres te escuchen, te recomienden y te aconsejen, para mí, es una de las cosas más importantes, ya que ellos saben más de la vida que tú, pero si no lo hacen siempre irás por el camino equivocado.

    Si ni tu padre te dice que te quiere de vez en cuando, no te presta mucha atención y parece como si pasase de ti, terminas por pensar que no te quiere aunque de verdad es la persona que mas te quiere, pero no te lo demuestra.

    Un saludo

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  2. Hola, Ángel:

    Yo creo que si comprendes por qué un hijo (tú mismo) hace o pide algo a su padre para provocar en él una reacción que conoce de antemano, sabiendo, también de antemano, cuál será la suya, como hijo, frente a la respuesta de su padre, lo que toca es utilizar la inteligencia emocional. Si sabes que para atravesar una pared el cabezazo no sirve, y además duele, habrá que buscar otro método.

    Tienes razón en pedir coherencia a los padres, en desear que hagan lo que predican; que sean dialogantes, pero firmes en sus convicciones; que sean flexibles para admitir que a veces se equivocan; que no usen el premio o el castigo sin sentido o de forma arbitraria.
    En fin, tienes mucha razón en muchas cosas, pero frente a la realidad, si queremos modificarla, nos toca, primero comprenderla bien, y segundo, encontrar el modo de abordarla de manera que la transformación sea beneficiosa para ambas partes. Y esto, muchas veces pasa por examinar nuestro modo de actuar y cambiar en nosotros aquellas cosas que encienden el conflicto.
    Todo problema tiene una solución, sino no sería un problema, sino una fatalidad. Así que todo problema es, a su vez, una oportunidad de crecimiento personal... y de mejorar aquello que no somos nosotros (tus padres, tus amigos, el mundo...).

    Una última cosa: dices que “a nuestra edad las órdenes lo vemos como algo impuesto y obligado "por huevos".
    Ángel, una orden siempre es algo impuesto, sino lo llamaríamos de otro modo: “diálogo”, “acuerdo”, “pacto”...

    Ya sé que lo que quieres decir es que prefieres que te pidan las cosas con buenas maneras a que te las “ordenen”. Pero esto es algo que se puede conseguir hablando con quien te ordena, haciéndole ver que te puede pedir las cosas con cordialidad y que esto no debilita su autoridad, sino que, al contrario, la refuerza.

    Bueno, Ángel, no puedo negar que has hecho un esfuerzo importante en la redacción del comentario, y veo que estás bastante de acuerdo con lo que dice el texto. Espero que mis puntualizaciones te puedan ayudar en algo... y también que el próximo curso te animes a seguir participando en el blog.

    Un saludo.

    PD. Hoy, por falta de tiempo, no te señalaré las faltas ortográficas, la mayoría de las cuales están centradas en los acentos. Deberías repasar la acentuación en relación a las palabras agudas, llanas y esdrújulas. Son normas muy sencillas que mejorarían mucho tu nivel de escritura, porque por lo demás te expresas bastante bien. En este aspecto, puedes mejorar o no mejorar. Eso depende de ti. No necesitas ninguna orden. Yo sólo te digo que puedes hacerlo y que me gustaría que te lo propusieras.

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  3. JAVIER GARCIA MARTIN11 de junio de 2010, 16:39

    Nuestros padres no se dan cuenta muchas veces de los errores que ellos tienen pero en nosotros los ven todos y no se dan cuenta que quizás nuestros errores son un reflejo de todos los suyos y que copiamos algo que hemos visto en casa y que no solamente la educación es el colegio sino que ellos tienen que enseñarnos valores pero tienen muchas veces que predicar con el ejemplo, también tienen que saber que nosotros inconscientemente somos muy listos y sabemos como conseguir algo y como llegar a sacarlos de sus casillas y hacer que se enfurezcan y sobre todo cuando llegamos a una edad como la que tenemos ahora. Pero además nos resulta a veces difícil comunicarnos con ellos porque o no quieren escuchar o lo consideran una tontería. Un saludo

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  4. Mavile 1º Bachillerato (Ciencias)12 de junio de 2010, 14:24

    Hola Carmen:

    Bonita carta, me ha gustado. Puede que yo también diría lo mismo en algunas de la ocasiones.

    Se nota un rechazo del padre al hijo o mejor dicho una critica del hijo al padre.
    De parte del padre se notan muchas carencias, como falta de compromiso, libertad, cobardía…Y de parte del hijo no me gusto esta frase “Cuando yo hago algo malo no me exijas que te diga por qué lo hice, a veces ni yo mismo lo sé” por una parte es normal, por tener un padre como es, pero por otra el podría intentar mejorar como persona si se da cuenta que comete errores. En la carta pide a su padre que mejore, pues entonces en este caso el padre podría decir lo mismo, siempre hay una razón de un hecho.

    Estoy de acuerdo con que toda la educación tanto positiva como negativa principalmente se aprende en casa. Como por ejemplo si tu padre te grita, lo más probable que tú también reacciones del mismo modo ante situaciones como esa. Pero hay excepciones como en todo. Como en las familias con poca moral y ética salen niños educados y viceversa.

    También quiero decir, si se cumpliesen todos los deseos del autor en la carta, tiene que ser un padre perfecto, lo cual no es muy real. Ya que los padres, pueden también cometer errores como todo el mundo, pero yo creo en general tienen la intención de desear todo lo mejor para nosotros.

    Un saludo.

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  5. Tienes razón, Javier.

    Pero es que ser padre no es nada fácil. Un día, de pronto tienes un hijo y eso te convierte inmediatamente en padre, pero no tienes ni idea de lo que es esto.

    Sí, tienes la voluntad de hacerlo lo mejor posible y a tu hijo para ir aprendiendo el oficio de ser padre, porque la vocación la damos por supuesta...

    Yo creo que el texto dice bastante sobre la complejidad de la relación padre-hijo. Y pienso que lo mejor que puede hacer un hijo por sí mismo es ser un buen hijo.

    ¿Qué significa ser buen hijo? Esta respuesta la ha de buscar cada uno en sí mismo. Y debe encontrarla. Al igual que el padre debe hallar la respuesta a su inevitable pregunta: ¿Cómo puedo ser mejor padre?

    Un saludo, Javier.

    PD. Por cierto, tienes que obligarte a aprender el arte de poner "comas" en tus comentarios. Piensa que una coma puede cambiar todo el sentido de un texto.

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  6. Es verdad lo que dices, Mavile,

    pero no debemos olvidar el contexto "literario" del escrito: es la carta de un hijo diciéndole a su padre cómo le gustaría que fuera como padre y, como bien dices, dibuja un padre ideal.

    Del hijo, nada sabemos, excepto que le gustaría tener un padre como el que describe.

    Como no existe el padre perfecto, nos faltaría una carta de un padre imperfecto que nos contara como le gustaría que fuese su hijo.

    La verdad es que cambiar al otro es largo, complicado, y, en ciertos aspecto, imposible. Así que introducir la aceptación y cierta tolerancia en el vínculo padre-hijo nunca estará mal.
    Y, como en toda relación, dos se aceptan cuando se reconocen y se respetan.

    Un saludo

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  7. Gracias Carmen, el próximo curso me animaré a comentar más ya que me ha gustado.

    Intentaré mejorar en el tema de los acentos. Y como el mismo texto dice también te doy las gracias por proponerme que mejore en ese tema y no sea algo impuesto, simplemente una propuesta.

    Un saludo Carmen.

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  8. Muy bien, Ángel, me alegra saber sobre las decisiones que libremente has tomado. Son acertadas, de esto puedes estar seguro.

    Bueno, pues el próximo curso espero que visites con cierta regularidad el blog y espongas alguna reflexión cuando un tema te interese.

    Un saludo muy cordial.

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