viernes, 4 de junio de 2010

*Modernidad descarrilada

Jürgen Habermas (Dusseldorf, 1929), pensador icono de la izquierda y uno de los herederos de la Escuela de Frankfurt, es una voz crítica con el capitalismo y con la sociedad de comunicación de masas que lo envuelve.
Llamó la atención su debate con Peter Sloterdijk: para Habermas, la selección genética para mejorar la raza humana es una idea cercana al pensamiento nazi.
Ahora, publica "Entre naturalismo y religión”, una selección de escritos en los que defiende la aportación de la religión para corregir los fallos de la Ilustración y una "modernidad descarrilada".
En esta entrevista Jürgen Habermas reivindica el valor de la religión, que según el filósofo, permite regenerar "la conciencia de compromiso" en un mundo en que el respeto a toda regulación moral y legal, y el sentido de justicia la moral desaparece bajo el poder económico.

.-La religión a principios del s.XXI.
Para Habermas, la caída del sha en Persia y la fundación de la República Islámica en Irán ya anunciaban que la religión tendría un papel político. Y como ejemplo del mal uso de la religión como arma política, Habermas señala los atentados suicidas en Israel, el 11-S y el 11-M.

.-Escéptico con la modernización
"Me he vuelto escéptico en relación con una modernización que amenaza con perder su propia base normativa en el derecho y la moral", dice Habermas.
"Piense en el cálculo económico, que invade la justicia y que socava el derecho penal. Piense en los ejemplos de la privatización de la guerra, de la administración de prisiones, del suministro de energía y del sistema sanitario. El Estado deja elementos clave de la protección del bien público en manos del mercado. En todas partes, las regulaciones normativas, así como las legislativas y las morales, están desapareciendo y son sustituidas por cálculos de beneficios."

.-No sólo la moral es sustituida por intereses económicos. Además, los Gobiernos desprecian el derecho internacional.
"Desde que el Gobierno estadounidense ya no respeta el derecho internacional ni a la ONU y practica una obvia política de doble rasero, aumentan cada vez más el número de estados que siguen este ejemplo y se aplican en la búsqueda sin escrúpulos de sus propios intereses nacionales".

.-Buscando alternativas: la fuerza moral de la religión.
"Conviene echar mano con cautela de todos los recursos que permiten la regeneración de la conciencia del compromiso. Y la religión ocupa un lugar preeminente en esta cuestión.A lo largo de los siglos, en la vida moral de las comunidades religiosas no sólo se han ido formando y se han conservado prácticas de respeto, cuidados y ayuda mutuos. Sobre la base de una vida estabilizada litúrgicamente en las parroquias las relaciones con los demás y los sentimientos morales encuentran una expresión articulada.

En Occidente se ha producido una simbiosis entre cristianismo y metafísica. Muchos conceptos filosóficos básicos, como autonomía y responsabilidad, individualidad y dignidad humana han acogido en su seno un potencial de significado religioso y han nutrido en cierto sentido a un público general de creyentes, no creyentes y adeptos de otras creencias.

.-La Ilustración se ha vuelto estrecha de miras.
"Una razón limitada como la nuestra - y no conocemos ninguna otra- debería ser consciente de sus límites. Creo que las grandes religiones del mundo, que nacieron al mismo tiempo que la filosofía griega, pertenecen, igual que ésta, a la genealogía de la razón. Y la razón moderna, o posmetafísica, no acabará de comprenderse a sí misma hasta que no entienda su relación con la religión como un aspecto de la mente que, no obstante, le es ajeno o queda fuera de ella."

.-La justicia y ética judeocristiana, esencial en nuestra cultura política.
"En los estados miembros de la Unión Europea viven en la actualidad tantos ciudadanos no cristianos que sería inaceptable fundamentar el orden político sobre valores cristianos. Naturalmente, la contribución histórica que la moral de la justicia judía y la ética del amor cristiana han aportado a la formación del individualismo moderno y del universalismo igualitario puede y debe intervenir en el autoconocimiento político de los ciudadanos europeos.

.-Sí al velo: que se adapten los nativos.
"No basta con exigir a los inmigrantes que aprendan la lengua y que se adapten a la cultura del país de llegada. También los ciudadanos autóctonos deben aprender a comprender las formas de vida culturales de sus nuevos compatriotas. Para combatir el odio y la violencia debemos introducir las reglas del Estado de derecho, con aplomo pero sin imposiciones. Entre esas reglas está la igualdad de derechos entre hombre y mujer, pero el uso del velo en las calles y en los puestos de trabajo europeos es también un símbolo legítimo de la imagen personal pública de una cultura minoritaria muy marcada por su religión."

Jürgen Habermas se muestra optimista con el Islam, y piensa que evolucionará hacia la democracia y los derechos humanos. "A la alianza de civilizaciones sólo cabe desearle éxito", dice.

No hay comentarios:

Publicar un comentario